Para los que en este tema están en las mismas condiciones de desconocimiento que yo hace un año, lo primero que hay que decir sobre las Skills es que se trata de una forma de promocionar la formación profesional y estimular y motivar a todos aquellos que deciden estudiar un ciclo medio o superior.

¿Qué es SpainSkills? Persiguiendo el mencionado objetivo, es la competición nacional de estas  Skills en España, celebrada cada dos años. Este año, en su trigésimo tercera edición, más de 200 alumnos de casi todas las comunidades autónomas españolas compitieron —mejor dicho, competimos—, en unas 32 especialidades, agrupadas en seis categorías: transporte y logística, construcción e instalaciones, fabricación, informática y comunicaciones, artes creativas y servicios. Son asombrosas la calidad y la profesionalidad  que demuestran los participantes en el desempeño de su trabajo.

Los ganadores de la medalla de oro en sus respectivas especialidades se medirán con contrincantes de todo el mundo a finales de este año en las WorldSkills, las cuales se vienen celebrando desde 1950. Los ganadores de la medalla de plata competirán en  Europe Skills del próximo año. Pero todos, sin excepción, se llevan consigo la satisfacción de haber participado, un montón de nuevas amistades y las ganas de repetir esta extraordinaria experiencia. Dicho así, parece increíble que la gente en general desconozca estos eventos tan impresionantes.

Teniendo más o menos claro qué son las Skills y qué importancia tienen incluso a nivel mundial, ¿no os preguntáis cómo acabé metido en algo así?

Hace casi un año, como ya dije, no tenía ni idea de que existieran las competiciones de las Skills, ni la internacional, ni la europea, ni la nacional, ni siquiera la autonómica, en mi caso GaliciaSkills. En cuanto a esta última, no era extraño, aún no se había celebrado nunca.

Los objetivos en GaliciaSkills son los mismos que el de las Skills en general, con la particularidad de servir para escoger a l@s representantes galleg@s para SpainSkills. Tengo que aclarar algo: ¡mis compañeros de clase me obligaron a participar! Yo no estaba seguro, pero… ¿por qué no? No había nada que perder. Además, al contrario de lo que debía pensar, no pensaba ganar…